INSUMISXS POR NATURALEZA
Nos eligen para ocupar cargos públicos, nos ceden la silla y nos regalan joyas, chocolates y flores… Y creemos que todo está bien.
Nos han llamado locas cuando hemos exigido que nos traten con respeto, cuando por todos los medios hemos intentado mostrarles que también tenemos derecho a trabajar porque también sentimos la necesidad de alimentarnos.
Nos han llamado putas cuando nos hemos desinhibido, cuando hemos aceptado nuestra condición de seres sensibles, pasionales y tiernos; cuando hemos amado sin reparos y cuando hemos reconocido nuestra vaginalidad.
Miles de veces hemos dicho ¡BASTA! y algunas veces hemos sido consecuentes con la razón. Sin embargo tenemos que esperar un 8 de marzo o un 25 de noviembre para reflexionar en torno al trato que nostras mismas nos damos o que permitimos que otrxs nos den… ¿y que pasa durante los demás días del año?... ¿olvidamos que somos mujeres y lo que ser mujer implica?...
Sucede desde la edad antigua, sucede en Colombia, en zonas rurales y en zonas urbanas, le pasa a niñas, jóvenes, madres y abuelas, y nos sucede a diario.
En Colombia, los niveles de violencia hacia las mujeres han incrementado absurdamente desde 1996, fecha que coincide perfectamente con el auge de actores paramilitares de extrema derecha que han hecho de la suyas y quienes han sido mandatarios, y eso debería ser sinónimo de reflexión para quienes aún consideran que este es un Estado Social de Derecho.
Sin embargo, mujeres y los hombres con corazones indomables, procuramos la coherencia de nuestra forma de actuar con los fines que perseguimos, y pretendemos la aportación de todxs en plena igualdad y libertad para la transformación de espacios sociales, así como en nuestras luchas para mejorar nuestra situación como trabajadores y trabajadoras.
Para que el 8 de marzo deje de convertirse en anécdota...
¡Organízate y Lucha!
Por: Vintage
